En esta entrada te voy a hablar sobre descubrir Kotor en un día y sobre qué ver en Kotor en un día de crucero. Llegar a la ciudad de los gatos en barco es habitual, aunque nosotras llegamos en coche por la carretera más bonita del mundo.
Imagínate que conduces bordeando la costa. A un lado de la carretera, nacen escarpadas paredes rocosas que te acompañarán a lo largo de los kilómetros .
A tu derecha, el mar. Tan cercano, tan apacible, tan a tu mismo nivel que parece que con estirar el brazo tendrás su superficie al alcance de las yemas de tus dedos. A lo lejos, el horizonte. Es un día un poco lluvioso, pero bonito por la tranquilidad que se respira. Puede ser nuestra música, puede ser el mecerse del agua sin más, o los tonos que nos regala el cielo..
De repente, una pequeña isla que parece hecha a propósito para albergar una iglesita de estrecho diámetro. Su torre puntiaguda y coloreada se alza en medio de ese paisaje de ensueño.
El Adriático se adentra en la costa de Montenegro creando esa especie de enorme lago abierto que las rocas resguardan y protegen. Son las Bocas de Kotor: una extensa bahía, ría del desaparecido río Bokelj, considerada por muchos «el fiordo más meridional de Europa». Y esos gigantes de piedra, macizos de los Alpes Dináricos.

KOTOR EN UN DÍA
En uno de los últimos días de nuestro road trip, decidimos dejar Dubrovnik y cruzar de nuevo la frontera para adentrarnos esta vez en Montenegro. En concreto queríamos hacer una excursión a Kotor y Budva, aunque empezó a llover un montón y nos quedamos con las ganas de la segunda.
A pesar de ser una pequeña ciudad, hay varias cosas que visitar en Kotor. Con apenas 5000 habitantes, su belleza la llevó a ser declarada Patrimonio de la Humanidad en 1979.
QUÉ VER EN KOTOR EN UN DÍA
Si llegas en barco, te dejará directamente en el puerto; si llegas en coche, este será tu acceso. De cualquier modo, lo primero que te llamará la atención será su emplazamiento: rodeada de una bonita muralla medieval, circundada por increíbles acantilados y con un conocido puerto, escala y parada obligada de multitud de cruceros.
Las calles cercanas son un buen sitio donde aparcar en Kotor.
CALLES Y MONUMENTOS DEL CENTRO
Su corazón, que data de los siglos XII- XIV, tiene el poder suficiente para conquistar el tuyo a medida que te pierdes por su entramado de estrechas y ancianas callejuelas.
Como vimos en otros lugares de Croacia, aquí también la piedra se hacía dueña de cada una de las casas de este cuidado centro.
Las contras de madera, los balcones de forja y esos magníficos suelos hechos piedra a piedra, reforzaban nuestra sensación de familiaridad rememorando Croacia.
Calles y plazas, revestidas en este material, en tonos muy similares para mantener la armonía se fueron abriendo ante nosotras .
Tiendas de regalos, heladerías, restaurantes, cafeterías y terrazas al aire libre salpicaban cada rincón.
Otra de las cosas que ver en Kotor en un día, también ubicada en el centro, es la Catedral de San Trifón.
Creada en el 1166, fue víctima de un terremoto tras el que su fachada y torres tuvieron que ser reconstruidas.
¿QUÉ PASA CON LOS GATOS DE KOTOR?
Te decía al principio que a parte de su ubicación entre el mar y las montañas y su precioso centro medieval, en Kotor, por supuesto, tu curiosidad se disparará pensando en qué hace un gato en cada esquina. Están en las calles, están representados en souvenirs de todo tipo en cada tienda, en museos…
Nadie sabe muy bien en qué momento se convirtieron en un símbolo de la ciudad pero está claro que los montenegrinos aprendieron a sacarles partido. Son Los gatos de Kotor, los reyes de los posados, tan acostumbrados, que no parecía que nos tuvieran ningún miedo.

MURALLA Y PUERTO DE KOTOR

Accedimos al centro de Kotor a través de una de las 3 puertas de su muralla . Esta, que todavía conserva fosos, torres y otros elementos originales, se extiende a lo largo de 4’5 km manteniendo en su interior cada una de sus casas.
Alza la vista a la espalda de la ciudad y la verás ascender por la colina. Nada más y nada menos que 1 km de escaleras, te elevarán a 260 metros donde se encuentra el Castillo de San Juan y unas de las descritas como mejores panorámicas de la bahía.
Si por ella accedimos, también ella nos dio acceso al puerto, y desde su parte más alta, una perspectiva preciosa de todo él.
A pesar de ser no muy grande, es una parada importante en muchos cruceros. De hecho, pudimos ver el impresionante Queen Victoria allí atracado.
Disfrutamos bastante de la mañana, pero después de comer, empezó a llover muchísimo y decidimos poner rumbo de nuevo a Dubrovnik. Eso sí, con una multa de aparcamiento a nuestras espaldas que aún todavía no tenemos muy claro por qué fue.
Si dispones de más tiempo, puedes valorar hacer una excursión por la bahía de Kotor o una pequeña escapada por las bellas costas de Montenegro.
Si te ha gustado esta entrada de qué ver en Kotor en un día de crucero y vas a continuar visitando la vecina Croacia, en estos link te dejo más información sobre Zadar, Split en 3 días, Sibenik y Trogir, los hermosos Lagos Plitvice, las cuevas de Barac, Rastoke o Petrcane y un día en barco entre Hvar y la Blue Cave.
Kotor y la carretera de ensueño que a él conduce, fueron el broche perfecto a un viaje inolvidable. De esos en los que ves como los lazos de la amistad, cuando es de verdad, se estrechan y unen todavía más. De esos en los que ríes hasta llorar día tras día, los enfados no existen, las preocupaciones quedan atrás o cuando se aproximan, entre todas conseguís alejarlas y terminar de nuevo riendo. En los que descubres un poquito más de ti, de lo que quieres y deseas, al descubrir ( y fascinarte positivamente) un poquito más de quien te acompaña. Fue de esos »paréntesis-globos de aire y vida», de experiencias únicas que compartidas, te llevan a querer aún más a esa Crossfit girl de las escaleiras y a esa Festivalera que ya querías. 🙂
Lugar lleno de encanto, nunca imaginé caminar por calles con tanta historia trasmitida a través de sus casas, sus calles y construcciones que datan de los siglos XII- XIV.
Me conquistó por todo y en la noche cuando todo esta quieto y sus gatos aparecen se transforma en algo fascinante y con un poder de energía maravilloso.
Estoy totalmente de acuerdo contigo Graciela, es tal como lo describes. Me alegra haberte hecho recordar un poquito 🙂